La tiña es una infección producida por hongos que puede afectar la piel de nuestros perros. Este problema puede producir pérdida de pelo, escamas y enrojecimiento en la zona afectada. Si bien es importante llevar al perro al veterinario para obtener un diagnóstico preciso, también existen algunos remedios caseros que pueden ayudar a tratar la tiña en perros.
Aceite de árbol de té
El aceite de árbol de té es conocido por sus propiedades antisépticas y puede ser un excelente remedio para tratar la tiña en perros. Para utilizarlo, debemos aplicar unas gotas del aceite directamente sobre la zona afectada de la piel del perro con un algodón. Es importante repetir este proceso varias veces al día hasta que la infección desaparezca.
Aceite de Neem
El aceite de Neem es un remedio natural con fuertes propiedades antifúngicas que puede ser muy efectivo para tratar la tiña en perros. Para utilizarlo, mezclaremos el aceite de Neem con un poco de aloe vera y lo aplicaremos dos veces al día sobre la zona afectada. Esta mezcla no solo ayudará a combatir la infección, sino que también ayudará a calmar el dolor y la inflamación.
Aceite de semilla de pomelo
El aceite de semilla de pomelo es otro remedio casero que puede ser muy efectivo para combatir la tiña en perros. Mezclando unas gotas de aceite con un poco de agua tibia, podemos aplicarlo directamente sobre la zona afectada un par de veces al día. Las propiedades antibacterianas y antifúngicas de este aceite pueden ayudar a eliminar la infección y a acelerar la recuperación del perro.
Cómo curar la tiña en perros con remedios caseros
La tiña es una enfermedad fúngica que afecta a distintas especies animales, como los perros y los gatos. Aunque es infecciosa y contagiosa, existen medidas que pueden ser tomadas para prevenir su aparición y propagación.
Síntomas de la tiña en perros
Los principales síntomas de la dermatofitosis en perros son lesiones circulares acompañadas de alopecia. También aparecen costras y escamas de un color amarillento y un olor peculiar que se desprende de la piel del perro infectado. Si se detectan estos síntomas, es importante acudir al veterinario de inmediato.
Causas de la tiña en perros
La tiña en perros se contagia cuando el can entra en contacto directo con otro animal o persona infectada, o con un ambiente o lugar contaminado. Por ejemplo, la cama de un perro contagiado, cepillos, cuencos de comida y otros accesorios también pueden ser una fuente de contagio.
Tratamiento de la tiña en perros
El tratamiento de la tiña en perros debe ser prescrito por un veterinario, quien puede optar por diferentes opciones, como la administración de antifúngicos o baños con champús especiales. Además, existen algunos remedios caseros que pueden ayudar a complementar el tratamiento estipulado por el veterinario, como el uso de vinagre de manzana o aceite de árbol de té.
Contagio de la tiña en perros a humanos
La tiña en perros también puede ser contagiosa para los humanos. En ellos, el hongo más común es M. canis, y es fundamental acudir a la clínica veterinaria en cuanto se observen los primeros síntomas.
Cómo prevenir la tiña en perros y qué hacer si mi perro ya la tiene
La tiña es una infección fúngica que afecta a la piel, el pelo y las uñas de los animales y las personas. En los perros, los organismos fúngicos susceptibles de causar la tiña son principalmente el Trichophyton mentagrophytes y el Microsporum canis, aunque en contadas ocasiones puede haber otros tipos de hongos causantes de la tiña.
El hongo puede contagiarse directamente entre animales o mediante contacto indirecto a través de superficies y objetos contaminados con pelos, polvo o restos de piel de animales infectados. También las personas están expuestas al contagio, desarrollando entonces erupciones cutáneas rojas acompañadas de posibles picores. La infección puede transmitirse asimismo a conejos, cobayas, etc.
El contagio con dermatofitos puede ocasionar síntomas en todos los perros, pero son más frecuentes los síntomas visibles en ejemplares jóvenes o con un estado de salud deteriorado. Los cambios dérmicos pueden ser inespecíficos, incluyendo, entre otros, enrojecimiento de la piel, calvas dispersas, pelos partidos, descamación de la piel y caspa. Algunos perros experimentan picazón.
Si se sospecha que el perro tiene tiña, se debe llevar al veterinario para un diagnóstico adecuado. El diagnóstico se efectúa con la observación del hongo de la tiña, ya sea mediante la localización de este organismo en el pelo, a través de un raspado dérmico en el microscopio o por cultivo en un medio específico. Algunos tipos de tiña son fluorescentes y se hacen visibles al iluminar al perro con luz ultravioleta.
La tiña se trata a través de remedios fungicidas o antifúngicos administrados en forma de comprimidos por vía oral, y, por lo general, también con un champú medicinal. La terapia ha de complementarse con una limpieza y desinfección a fondo destinados a evitar nuevos brotes. Dado que la tiña se contagia entre animales de forma directa deberá evitarse que el perro propio se relacione con perros que se sepa o se sospeche que están infectados. Igualmente, deberás abstenerte de usar accesorios (por ejemplo, cepillos o jaulas de transporte) empleados con otros canes. Si no puede evitarse esto último, los dispositivos deberán primero limpiarse cuidadosamente y desinfectarse.
Tratamiento natural para la tiña en perros
La tiña es una afección común en perros que puede causar picazón y pérdida de pelo. Existen tratamientos naturales que pueden ayudar a combatir el problema de manera efectiva. El vinagre de manzana y el vinagre de vino son efectivos para tratar la tiña en perros. Para utilizarlos, se puede diluir el vinagre con agua y aplicar sobre las zonas afectadas de la piel con una gasa o algodón. También existen productos naturales especializados para tratar el problema.
Además de los tratamientos específicos para la tiña, existen otros remedios naturales que pueden ayudar a aliviar los síntomas de la tiña en perros. La avena, por ejemplo, es beneficiosa para la piel de los perros y se puede preparar una pasta de avena para aliviar la picazón y la irritación en la piel. También se recomienda utilizar manzanilla para el cuidado de los ojos de las mascotas. Una preparación de infusión de manzanilla puede utilizarse para pulverizar sobre la piel alrededor de los ojos.
Es importante tener en cuenta que algunos remedios naturales pueden ser tóxicos si se administran en grandes cantidades. El limón, por ejemplo, es efectivo para repeler parásitos, pero es tóxico para los perros en grandes cantidades. Se recomienda preparar una solución de limón y agua para rociar sobre el pelaje de la mascota, evitando siempre las áreas de la piel que van a ser lamidas por el perro.
Dicho esto, la tiña es una afección común en perros que puede tratarse de manera efectiva con remedios naturales. El vinagre de manzana y de vino, así como la avena y la manzanilla, son algunos de los tratamientos naturales que pueden ayudar a tratar la tiña. Es importante tener en cuenta los posibles efectos tóxicos de algunos remedios naturales y utilizarlos con precaución.
