La calentura o fiebre es un aumento de la temperatura del cuerpo, generalmente causado por una infección. En estos casos, es posible tratar la fiebre con remedios caseros, tal como tomar líquidos, descansar, tomar un baño tibio, usar ropa ligera y medicamentos de venta libre como ibuprofeno, acetaminofeno y naproxeno.
Remedios caseros para tratar la fiebre
Además de los medicamentos de venta libre, existen otros tratamientos seguros y efectivos que se pueden hacer en casa para combatir la fiebre, como descansar, tomar baños tibios y usar ropa ligera. En el caso de los niños, también es crucial asegurarse de que tomen suficiente líquido y se les dé dosis adecuadas de acetaminofeno. Recuerda que siempre es clave consultar a un médico si los síntomas son demasiado persistentes o si se presentan otros síntomas como rigidez en el cuello, erupción cutánea o convulsiones.
Convulsiones febriles y meningitis
En algunos casos, una fiebre muy elevada puede causar convulsiones febriles, especialmente en niños entre los 6 meses y 5 años. Si un niño ha tenido convulsiones febriles en el pasado, es recomendable estar vigilantes ya que es más probable que las tengan nuevamente. Por otro lado, también es vital estar alerta ante posibles signos de meningitis, una infección más grave que puede estar indicada por síntomas como dolor en el cuello, sensibilidad a la luz o deshidratación. En estos casos, busca atención médica de inmediato.
Deshidratación y electrolitos
La fiebre también puede causar deshidratación, por lo que es esencial tomar muchos líquidos durante una calentura. Existen alternativas más atractivas para que los niños pequeños tomen más agua, como caldo de pollo caliente, paletas de hielo, gelatina de sabores y jugos de fruta diluidos. Además, es posible rehidratar el cuerpo con bebidas que contengan electrolitos, ya que el cuerpo necesita más agua para compensar su temperatura elevada.
Remedios naturales para bajar la fiebre en casa sin medicamentos
La fiebre es un síntoma que se presenta cuando el sistema inmunológico detecta una amenaza. No es una enfermedad, sino un síntoma que se acompaña con manifestaciones clínicas como sudoración, escalofríos y temblores, dolor de cabeza, dolores musculares, pérdida del apetito, irritabilidad, deshidratación y debilidad general. Se considera que hay fiebre cuando la temperatura corporal es mayor o igual a 38.3 °C.
Remedios naturales
Existen algunos remedios que permiten bajar la fiebre sin necesidad de medicamentos. Algunas medidas caseras que pueden servir para aliviar muchos casos de fiebre son aplicarse compresas húmedas, tomar una ducha tibia y desabrigarse, guardar reposo, beber líquidos saludables y tomar platos ligeros. También se mencionan algunas infusiones que podrían ayudar a mejorar los síntomas.
Medicamentos antipiréticos
Los medicamentos antipiréticos suelen ser muy efectivos para bajar la fiebre, pero no son la única opción disponible. Hay medidas básicas que se pueden aplicar en el hogar y están al alcance de todos, representando una alternativa más natural y que puede ser de utilidad en personas que ya estén consumiendo otros fármacos y no quieran excederse.
Compresas húmedas y ducha tibia
La aplicación de compresas húmedas es una de las estrategias más populares para bajar la fiebre. Las compresas se colocan en zonas como la cabeza, las axilas, la ingle y los pies. Se deben hacer solo con agua, ya que el alcohol aplicado de forma directa sobre la piel puede ser irritante, sobre todo en pieles sensibles. La ducha con agua tibia es similar a la aplicación de compresas húmedas. En algunas personas es útil para reducir el malestar y disminuir la temperatura corporal. El agua debe estar tibia, ya que la fría puede derivar un shock térmico y la caliente resulta sofocante y contraproducente.
Remedios caseros para bajar la fiebre en adultos y niños: guía completa
La fiebre viral puede ocurrir como resultado de una infección viral, como un resfriado o gripe. Es importante saber que cuando tenemos fiebre, nuestro sistema inmunológico está respondiendo para combatir la infección. Sin embargo, una fiebre alta puede implicar riesgos para la salud, especialmente en niños pequeños. Por ello, es significativo mantener siempre la fiebre bajo control.
Una de las formas más importantes de controlar la fiebre es mantenerse hidratado, ya que la fiebre hace que el cuerpo sude y pierda líquidos. Para ello, es recomendable beber todo lo posible para reponer los líquidos perdidos. Además, los reductores de fiebre de venta libre son una opción fácil y accesible para controlar la fiebre temporalmente y sentirse más cómodos.
Es crucial tener en cuenta que algunos remedios herbales, como suplementos, pueden mejorar la fiebre en animales pero no hay evidencia suficiente de que funcionen en humanos. Sin embargo, algunos estudios sugieren que la corteza de la moringa, una planta tropical, puede ser útil para reducir la fiebre. La moringa es una planta rica en nutrientes y antioxidantes que tiene propiedades antibacterianas. Por tanto, podría ser una buena opción para aliviar la fiebre.
En efecto, es fundamental mantener la fiebre bajo control, especialmente en niños pequeños. La hidratación y los reductores de fiebre de venta libre son una buena opción para controlar temporalmente la fiebre. Además, la moringa puede ser un remedio natural eficaz para reducir la fiebre en adultos y niños, aunque es crucial mencionar que se necesitan más estudios para confirmar sus propiedades.
Cómo preparar un baño de agua fría para bajar la fiebre en adultos y niños
La fiebre es una respuesta natural del cuerpo ante una infección o enfermedad. Sin embargo, cuando la temperatura corporal sobrepasa los 38 grados Celsius, es necesario tomar medidas para reducirla. Una forma efectiva de hacerlo es mediante un baño de agua fría.
Es significativo que el agua esté fría, pero no helada, ya que esto puede causar un choque térmico y empeorar la situación. Además, se puede agregar hielo si la temperatura corporal es muy alta. Sumergir el cuerpo en el agua durante 10-15 minutos ayudará a bajar la fiebre de forma efectiva.
Este método es seguro tanto para adultos como para niños, pero es clave supervisarlos durante el baño para evitar accidentes. Después de salir del agua, debe secarse con una toalla limpia para evitar enfriamientos.
No se debe utilizar agua helada ni alcohol para reducir la fiebre, ya que pueden tener efectos negativos en la salud. En cambio, un baño de agua fría es una opción segura y efectiva que puede ayudar a aliviar los síntomas mientras se espera a la consulta médica.
